Es un higienizante natural rápido y eficaz, ya que es capaz de higienizar aire, agua, alimentos, superficies, tejidos y mobiliario sin dañarlos. Además tiene un gran poder para eliminar y neutralizar olores. Esto es posible porque el ozono degrada todo tipo de compuestos transformándolos en subproductos inertes e inocuos que pierden sus propiedades. En pocos segundos se convierte otra vez en oxígeno, por lo que no deja residuos y es completamente respetuoso con el medio ambiente.
El ozono es el gas con el mayor poder higienizante y esterilizante que existe.